Rodrigo fue diagnosticado con leucemia linfoblástica aguda hace algunos años, y en ese momento recibió un tratamiento quimioterápico. Sin embargo, en 2021, la enfermedad regresó, y fue entonces cuando en el HEC (Hospital de Alta Complejidad) se llevó a cabo su primer trasplante de médula ósea, con la generosa donación de su hermano.
Durante el 2023, la enfermedad volvió y por eso fue necesario realizar tratamiento nuevamente. Al lograr la remisión, se llevó a cabo un segundo trasplante de médula ósea con un donante no relacionado proveniente de Eslovenia.
Este segundo trasplante se realizó de manera exitosa el pasado 27 de octubre, coincidiendo con el día de cumpleaños de Rodrigo. Un regalo de vida inigualable que marca un hito en su camino hacia la recuperación.
La historia de Rodrigo destaca la importancia de inscribirse como donante de médula ósea. La solidaridad y generosidad de aquellos que donan hacen posible que las segundas oportunidades sean una realidad para personas como él.