¡Queríamos compartirles un poco de lo que fue el viaje de Jana!
Durante su estadía, se realizó diferentes estudios tanto cardiológicos como neurológicos. Los médicos especialistas pudieron explicarle a ella y a su mamá un poco mejor de que se trata este Síndrome de Cantú que solo sufren 100 personas en el mundo.
A lo largo de esta experiencia, Jana pudo conocer a otros niños que tienen su misma enfermedad y como nos contó Natalia, su mamá, “Era impresionante como todos hablaban diferentes idiomas pero podían entenderse perfectamente”.
Jana se hizo muy amiga de una niña que se llama Ariadna, nos cuentan que parecían hermanas de lo bien que se llevaban!
A Jana le queda un viaje largo todavía, pero como nos contaba Natalia, las puertas se van a ir abriendo y ellas no se van a rendir!
¡Fuerza Jana, estamos con vos!